Aparecen unos piquetitos en las manos. Ellas quieren volar hacia tus pezones. Solo hay vacío. Por eso duelen de a poco, como estrellas que no encienden.
La lengua sueña con meterse en tu boca, fuerte, duro y ahora dulce. Otra vez duro. De nuevo suave. Van y vienen contornos de labios.
Un abrazo detenido en la noche que gira. Engranaje satisfecho de huesos que son de ella, que son tuyos.
La lengua sueña con meterse en tu boca, fuerte, duro y ahora dulce. Otra vez duro. De nuevo suave. Van y vienen contornos de labios.
Un abrazo detenido en la noche que gira. Engranaje satisfecho de huesos que son de ella, que son tuyos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario